jueves, 26 de agosto de 2010

Crónica de Obús y Los Suaves en Bilbao el 24 de agosto de 2010

Los Suaves somos todos!
El martes fue el día elegido para que el Rock tomase el recinto de Botika Vieja en Bilbao durante la festiva Aste Nagusia, y este año la selección estaba centrada en dos glorias del guitarreo en castellano, los renacidos Obús y unos Los Suaves en mejor forma desde que Yosi decidió, o se vio forzado, a portarse mejor durante los directos. La afluencia de público fue elevada (se notó que el concierto era gratis), aunque se disponía del espacio suficiente para guitarrear y saltar con cierta soltura.




Abrían Obús, que descargaron durante algo más de una hora un chaparrón de clásicos que fueron coreados por una mayoría a la que se le notaba que hacía tiempo que no escuchaba sus discos. La gran estrella del concierto, y diría que de la noche, fue el mítico Fortu, que mantuvo un ritmo alto en todo momento, desplegando un derroche vocal que llamó la atención a más de uno. Es evidente que a su edad Fortu no es capaz de alcanzar los agudos de un Halford en su época dorada, pero también lo es que, precisamente por su edad, es de admirar el esfuerzo que hace por darlo todo. Se merece un notable alto. Además, interactuó con el público de forma entusiasta, bajando a las primeras filas, escalando las torres, pidiendo palmas y hasta subiendo a un grupo de niños en el cierre de “Esta ronda la paga Obús”.


Sólo lo hago en moto”, “Vamos muy bien”, “Dinero, dinero”, “Te visitará la muerte”, “Que te jodan” y otras amenizaron el arranque de una noche que dejó a una gran mayoría satisfecha. Bien por los Obús, que sólo unos días antes habían cancelado su concierto en Valencia por problemas de salud del guitarrista. Es de elogiar su empeño por mantener arriba el gran nombre de una leyenda del Metal nacional.


Tras la necesaria pausa, la escena se decoró con gatos para preparar la salida de Los Suaves, a quienes he visto varias veces en los últimos años, y por lo tanto puedo certificar que su estado ha pasado de suspenso a notable. Los desbarres de Yosi quedan afortunadamente atrás, y las opiniones ahora se centran en discutir si el repertorio ha sido el adecuado o no. Tengo la impresión de que mucha gente se quedó con ganas de más clásicos, pero al igual que en el caso de Maiden en Valencia, defiendo que las bandas históricas se atrevan a atacar sus nuevos temas, aunque la mayoría quiera que siempre caigan los clásicos.


Cuando uno ha visto 5 ó 6 veces a Los Suaves, agradece que no siempre toquen, por ejemplo, “Peligrosa María”. Y eso hicieron los de Ourense, que en la noche bilbaína presentaron hasta cinco canciones de su último trabajo “Adiós, adiós”: la que da título al disco, “Cuando los sueños se van”, “Se alza el trueno”, “Frío como una llave” y “Esa noche te perdí”. Toda una osadía que, insisto, yo valoro positivamente.


La intro clásica nos presentó a una banda con ganas, que atacó “Preparado para el Rock N’ Roll” con un Yosi a quien se le entendía inusualmente bien, con un Charly sonriente como de costumbre, y con un Alberto Cereijo que da la impresión de estar supervisando todo constantemente. El ambiente festivo se enfrió un poco al seguir varios temas de la última etapa, entre ellos “San Francisco Express” y un “Palabras para Julia” que en mi zona fue muy poco celebrado a pesar de ser uno de los favoritos de los fans.


Lo bueno de Los Suaves es que cuentan con tantas canciones que son capaces de no hacer dos set lists iguales en todo el año, e incluso se lanzan a conformar medleys que nos permiten degustar temas no habituales. El del martes fue especialmente acertado con “Dile siempre que no estoy” + “Luis y su mujer” + “Miénteme” + “Pobre jugador” + “Viejo”. Yosi estuvo saltarín y vacilón como en sus mejores ocasiones, y a mí me sigue llamando la atención cómo es posible que se despida tantas veces a lo largo de un concierto, va un cuarto de hora y ya empieza a decir adiós! Pidió más guitarreo, se puso una camiseta del Athletic de Bilbao y realizó su número habitual de la ikurriña con la bandeira galega.




No cayeron “Pardao” ni “Peligrosa María”, pero por el contrario comprobé cómo otras dos de la última etapa son cada vez mejor acogidas: “Mi casa” y “Ya nos vamos”. Los temas del último disco fueron seguidos con cierta frialdad, y el contrapunto llegó, como siempre, con “Dolores”, coreada hasta por las camareras.


En definitiva, fue una buena noche de Rock y nostalgia para muchos bilbaínos que hacía tiempo que no se acercaban a ver a dos leyendas vivas como Obús y Los Suaves, dos bandas que estuvieron a la altura de Aste Nagusia.

lunes, 23 de agosto de 2010

Crónica del concierto de Iron Maiden en Valencia el 21 de agosto de 2010

Iron Maiden + Edguy
Valencia. Auditorio Marina Sur
22.000 espectadores
66 euros + 6 de gastos de distribución

Edguy, con mucho calor
Ha sido un gran acontecimiento metalero. Masivo. Absolutamente masivo. Aunque como casi siempre, se puedan extraer críticas negativas, y las de esta ocasión no son menores. Hemos visto a un grupo atravesando un momento muy dulce, pero gran parte de los 22.000 que estábamos allí no vimos bien ni escuchamos con nitidez. Y ya va siendo hora de que se nos dé un trato equivalente al precio que pagamos. Podríamos haber disfrutado mucho más.

Valencia, tomada por heavies de toda edad y condición
Que este concierto, en cuanto a sus magnitudes, iba a desbordar las expectativas, me quedó claro en cuanto llegué a Valencia el viernes. Era mi primera vez en la ciudad, que ha estado tomada por los heavies durante tres días. Incluso en el momento de escribir estas líneas, en el aeropuerto de Manises, el domingo por la noche, el paisaje es como para alegrarse: camisetas negras por doquier. La mayoría, claro, de Maiden.

Pasearas por donde pasearas en Valencia eso veías, melenas y más melenas. Unos ya situados, visitando la ciudad. Otros llegando y tomando los hoteles. El mío estaba lleno el sábado y tuve la suerte de desayunar las dos mañanas al lado de los Edguy, también allí alojados. Ahí tenéis una foto junto a Tobbias Sammet sacada con "Hallowed be thy name" de fondo, en el tramo final del concierto.
El pesado de Tobbias Sammet dándome la chapa cuando yo quería escuchar "Hallowed be thy name", y el segurata que también quería salir

22.000 personas asistimos al espectáculo, que hasta Bruce Dickinson calificó como masivo. Como sabéis, era el cierre de la gira, aunque volverán a la carretera el año próximo para presentar el recientemente publicado "The final frontier". Y no hubo sorpresa tal y como había asegurado Steve Harris a Mariano Muniesa en el último número de Kerrang! El repertorio fue el anunciado y ni una canción más. Siento que hubiera mucha gente esperando otra vez "The trooper" y las demás, pero los que seguimos su trayectoria, también en esta última etapa salimos muy contentos.

Tanto el escenario como las pantallas estaban muy bajas, al igual que el sonido
La banda sigue en excelente forma, aunque habréis de disculpar que no me prodigue en detalles del show pues el gentío me tapaba la visibilidad del escenario durante la mayor parte de la noche. No es que fuésemos demasiados para un concierto, es que el escenario estaba bajísimo, y las pantallas, como podéis apreciar en la foto, estaban a la misma altura de las tablas. Es decir, si no veías la escena, casi seguro que no veías las pantallas.

Hubo gente de toda la Península: a mí me saludaron personas de San Sebastián y otros puntos de Euskadi, conocí a Eusebio de Alacant, y destacaba la gran cantidad de europeos presentes, especialmente británicos, que acudían a la llamada de la Doncella. En el hotel, un metalero guiri me confesaba que no los había visto aún en este tour, pero sí había asistido a todas sus giras en los últimos 15 años. "Qué envidia", le dije.

Antes que Iron Maiden, y cuando aún castigaba el sol, Edguy se marcaron un animado concierto, en el que una buena tropa ya congregada en el recinto disfrutó de lo lindo. Edguy sonaron de miedo, con ese gran músico que es Tobbias Sammet al frente. Sammet no dudó en calificar a Iron Maiden como la banda de Heavy Metal más grande del mundo. "Si Edguy suenan así, ya verás Maiden", dije yo. Pero no, los británicos padecieron problemas de sonido, que estaba bajo, se iba y volvía, lo que sumado a la escasa visibilidad, obligaba a extremar la precaución.



Cuando cayó la noche, aunque 40 minutos antes de la hora anunciada, la intro tomó el escenario, ubicado en un entorno ideal, en pleno canal, al final del puerto, y al que sólo se accede a través de un puente levadizo. La organización también es responsable del atraco a mano armada que suponían los precios de la bebida: cobrar 8 euros en barra y 10 en los surtidores móviles por un litro de cerveza debería ser perseguible penalmente. Vamos, hablando en plata es un puto atraco.

Dicho esto, sonó el "Doctor, doctor" de UFO y empezó aquello a moverse. Abajo luces, fondo de telón simulando el espacio sideral, e intro. Aquello era un clamor. Qué ganas de ver a los Maiden. Los primeros acordes de "The wickerman" los intuí entre el griterío, y el primer estribillo nos arrastró a todos en un bote masivo que certificó que este tema está ya en el Olimpo del repertorio maidiniano. Pasaron varios minutos hasta que pude ver a Bruce. A Adrian le vi después de varias canciones, y vuelvo a preguntarme: ¿No son capaces los promotores de diseñar un espacio para grandes audiencias? ¿Un lugar de abajo arriba para que vean todos? Porque os aseguro que yo estaba de mitad hacia adelante y no veía nada.

Lo bueno fue que como el repertorio se basaba en los últimos discos, los menos duchos se fueron moviendo hacia las barras y eso despejó el panorama. Para cuando llegó "Dance of death", los que querían sólo "The trooper" y "Run to the hills" ya estaban resoplando. Pero yo insisto, "...Benjamin Bregg", "Brave new world" o "No more lies" suenan atronadoras en directo. Especialmente esta última, que en disco no me convence, logra una perfecta comunión con el público.



Me sorprendió lo mucho que se coreó también "El Dorado", a pesar de ser la más reciente, aunque al caer "Wrathchild" aquello se removió mucho más. Dickinson sigue siendo un cantante soberbio, que no para de brincar, y Steve Harris comanda al grupo de forma implacable, apuntando con su bajo constantemente. Todo sale según lo esperado, Gers hace piruetas con la guitarra, Smith trata de pasar desapercibido, y Nicko... Nicko es quizás el más querido por la gente dada su simpatía. Iron Maiden son los más grandes por algo.



El tatu soñado
El bloque de canciones de "A matter of life and death" son las que menos entusiasmo generan, y eso lo aprovecho para avanzar y mejorar mi visibilidad, hasta que puedo escuchar cómo Bruce da la bienvenida a la familia Maiden a los muchos que esta noche les ven por primera vez. A ellos, y a Dio, les dedica "Blood brothers".

El delirio llega con "Fear of the dark", y con la salida de Eddie durante "Iron Maiden". Después, los tres clásicos para remachar. Cuando empieza a sonar "The number of the beast" dos colegas se abrazan delante de mí, como si fuera precisamente la primera vez que la escuchan en directo. Así acaba el concierto, con caras de felicidad.



Os esperamos en la próxima gira. Y a ver si os podemos ver mejor.

Repertorio

1.The Wicker Man


2.Ghost Of The Navigator

3.Wrathchild

4.El Dorado

5.Dance Of Death

6.The Reincarnation Of Benjamin Breeg

7.These Colours Don't Run

8.Blood Brothers (Dedicada a Ronnie James Dio)

9.Wildest Dreams

10.No More Lies

11.Brave New World

12.Fear Of The Dark

13.Iron Maiden

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14.The Number of the Beast 

15.Hallowed Be Thy Name

16.Running Free

lunes, 16 de agosto de 2010

Otra súper-gira que no vendrá por España... Por ahora

Buena parte de los metaleros europeos van a tener la oportunidad de asistir, próximamente, a una interesante gira en la que se presentarán cuatro de las bandas estadounidenses más interesantes del momento y, sin duda, más en forma: Disturbed, Papa Roach, Buckcherry y Halestorm.

Los primeros encabezarán la gira para presentar su nuevo trabajo "Asylum", continuación del estupendo "Indestructible", que ya comentamos aquí. La banda de Chicago es una de las más poderosas del Metal actual, y en su país arrasan tanto que empiezan a rivalizar con los mismísimos Metallica.

El vídeo de adelanto de este nuevo disco se titula "Another way to die" y suena así.



Sus tres escuderos europeos serán dos bandas que pasaron recientemente por el festival Kobetasonik, en donde dejaron un muy buen sabor de boca: Buckcherry y Papa Roach, los primeros con un nuevo disco que ha entrado al Top 10 del Billboard, "All night long". Y, por último, la banda de la bella Hale, Halestorm, cuyo primer disco hasta ahora también os comenté hace algunas fechas.

La parte de la gira confirmada hasta ahora no incluye ninguna fecha en la Península, pero no pierdo la esperanza, aunque ninguno de los cuatro mueva masas, hasta ahora, entre nosotros.





"Rockstar Taste of Chaos" with PAPA ROACH, BUCKCHERRY and HALESTORM:

Nov. 15 - Helsinki, FIN - Hartwall Arena
Nov. 17 - Stockholm, SWE - Hovet
Nov. 19 - Oslo, NOR - Spektrum
Nov. 20 - Copenhagen, DEN - KB Hall
Nov. 22 - Berlin, GER - Arena Treptow
Nov. 24 - Vienna, AUT - Gasometer
Nov. 25 - Munich, GER - Zenith
Nov. 26 - Winterthur, SWI - Eishalle Deutweg
Nov. 28 - Freiburg, GER - Rothaus Arena
Nov. 29 - Hamburg, GER - Sporthalle
Dec. 01 - Dusseldorf, GER - Philipshalle
Dec. 03 - Luxembourg, LUX - Rockhal
Dec. 05 - Brussels, BEL - Forest National Club
Dec. 07 - Birmingham, UK - National Indoor Arena
Dec. 08 - London, UK - Wembley Arena
Dec. 09 - Plymouth, UK - Pavllion
Dec. 11 - Glasgow, UK - SECC
Dec. 12 - Manchester, UK - Central
Dec. 13 - Nottingham, UK - Trent FM Arena