BBK Live Festival, Bilbao
Jueves, 8 de julio de 2010
Rise to Fall, Volbeat, Bullet for my Valentine, Skunk Anansie, Rise against, Slayer, Rammstein y Anti-Flag
Precio: 50 euros el día, 110 bono para los tres días (también actuaron Faith no more, Alice in chains, Pearl Jam, Manic street preachers y otros)
Esta baqueta de Dave Lombardo, que tuvo la suerte de pillar mi colega Josu, fue la guinda a una buena primera jornada del BBK Live festival, a la que acudimos más de 24.000 personas, a pesar de que fuera jueves, y del calor. Desde la apertura de puertas, a las cinco de la tarde, hubo colas para acceder al recinto de Kobetamendi, lo cual creo que fue la prueba de que había ganas de festival en Bilbao. La primera jornada del festival era la única con ingredientes claramente metaleros, y a ella nos agarrábamos ante la ausenncia este año del Kobetasonik.
No toda la tarde-noche era de nuestro agrado, pero sí queríamos aprovechar al máximo los momentos, a priori, más deseados: la primera actuación de Bullet for my Valentine en Euskadi, con éxito abrumador en todo el mundo, los Slayer del nuevo "World painted blood" y Rammstein, que nos alucinaron en el BEC hace unos meses, y que podían reventar al aire libre. El resto de bandas también apetecían, pero no eran puramente nuestro estilo, así que os advierto de que sus crónicas serán muy escasas. Acompaño vídeos de calidad que grabé.
Empezó todo con los bilbaínos Rise to fall, a quienes apenas pudimos ver desde la distancia y en el tramo final de su actuación por las señaladas colas. Su estilo death-melódico tiene seguidores, aunque como ya se ha dicho en otras ocasiones, deberían marcar progresivamente una identidad propia que les evitara comparaciones demasiado evidentes. Cuanto antes lo hagan, antes se alejarán de esos fantasmas. Tienen juventud, talento y fuerza, y por ahora dos trabajos en el mercado, así que están a tiempo de dejar el sonido sueco simplemente como influencia, en lugar de como base compositiva. Su cantante confesó que el sueño de tocar allí arriba había tardado demasiado en cumplirse, y había durado muy poco.
Después subieron, con algo de retraso, lo cual pagaron ellos en tiempo y las bandas que vinieron detrás para cumplir los horarios, los daneses Volbeat. Les conocí, como casi todos, con la versión de "I only wanna be with you" hace un tiempo y me resultaron una banda interesante. Como defecto, les achaco que sus riffs son demasiado lineales, pero eso también puede ser una virtud -fijaos en AC/DC-, y como puntos a favor tienen muchas cosas: actitud, capacidad para componer temas pegadizos, un estilo muy característico, y un cauce de sonidos que van desde el Hard-Rock hasta el metal más clásico con influencias hardcorianas melódicas.
Aprovecharon bien su tiempo, y aunque eran los segundos, acabaron levantando muchos puños, especialmente en el segundo tramo de la descarga, que fue la más metalera. Le dedicaron un tema a Dio (fueron los únicos en todo el día!) y, sobre todo, divierten, porque realmente transmiten buen humor.
Justo después, y apenas con un minuto para ir de un escenario a otro, en el principal, salían Bullet for my Valentine. No pudieron estar en el mismo festival en 2007 por los problemas vocales de Matt Tuck, y desde entonces se han convertido en una banda de referencia en la regeneración del Heavy Metal. Con tres discos en el mercado, estos galeses tienen un registro de ventas y hits sólo superado en la historia del Metal por Iron Maiden con sus tres primeros trabajos, así que no conviene minusvalorarlos, sobre todo por su ambición sin límites. Me gusta que sean ambiciosos y que tengan hambre de éxito, quizás por eso algunos los machacan en los foros.
Presentaban su gran "Fever", de reciente publicación, y con su primer temazo abrieron, "Your betrayal". En las primeras filas había mucha juventud, demasiada, lo cual motivó que los pogos fueran como de juguete (al menos en la parte izquierda hacia el escenario), y también que algún hijo de puta se dedicara a ratear carteras. En mi posición, hasta dos personas sufrieron robo. Ojalá esa gentuza se quede en sus casas. BFMV estuvieron bien, correctos, sonaron mal por momentos debido a problemas en los micros, y eché en falta algo más de cercanía, más interacción con la gente.
La ejecución, sin embargo, fue impecable. "Fever", "Waking the demon" y la archiconocida y aclamada "Tears don't fall" siguieron la tormenta. Por suerte, el sol se había escondido tras las nubes, pero el bochorno era insufrible. Si eso lo unes a las polvaredas de las primeras filas, imagínate lo bien que se respiraba.
La actuación lineal no tuvo altibajos, aunque temas conocidos como "Scream aim fire" funcionaron muy bien. Tocaron muchas canciones del último disco, y cometieron un fallo garrafal al despedirse con "Alone", una canción que podría cambiarse por otra claramente.
1.Your Betrayal
2.Fever
3.Waking the Demon
4.Tears Don't Fall
5.Pleasure and Pain
6.4 Words (To Choke Upon)
7.The Last Fight
8.Scream Aim Fire
9.Begging For Mercy
10.Hand of Blood
11.Alone
Después llegaba el turno de Skunk anansie, con la poderosa Skin al frente, pero me tomé un descanso tras la guerra de BFMV. Aún así, lo poco que vi me gustó. Tras varios años parados, siguen manteniendo la fuerza que les hizo ganar cotas de fama en los '90. Skin se lanzó sobre el público y allí siguió cantando, y la gran cantidad de gente que se congregó en torno al segundo escenario coreó sobre todo clásicos como "Charlie big potato" o "Weak".
Tras ellos, los hardcorianos Rise against abarrotaron el primer escenario con su propuesta veloz. Tampoco os puedo dar muchas claves dado que nunca los he seguido y tampoco son estrictamente mi estilo, pero salieron ganadores.
Nuestro momento era el siguiente, el tanque sónico de Slayer, los verdaderos padres del Thrash Metal. Confieso que temí por su actuación porque habían cancelado el show previo de París por problemas vocales de Tom Araya, pero allí estuvieron, y al vocalista le recibieron dos banderas chilenas. Slayer eran los que más desentonaban en un cartel demasiado heterogéneo, y creo que eso se notó en cuanto a la afluencia de público, e incluso en las primeras filas, en las que los pogos fueron eléctricos, pero reducidos para un concierto festivalero.
Las luces rojas recibieron al cuarteto, que descargó de inicio dos temas de su último disco, "World painted blood" y "Hate worldwide", y la cosa se fue caldeando. Me sorprendió "God hates us all", pues no la vienen interpretando últimamente, y también "Dead skin mask". Llama la atención ver a Araya sin agitar las greñas, y quizás no todo el mundo sepa que eso se debe a una operación de espalda a la que se sometió hace meses. Tras eso, le han prohibido excederse con su cuello, así que su papel en el escenario puede parecer el de un impertérrito, pero tiene razón de ser.
Slayer son un seguro de vida: si lo quieres es leña, ellos te la dan por duplicado. Si quieres autenticidad, ellos son auténticos, si quieres honestidad, ellos te la dan. Uno tras otro, fueron cayendo clásicos del Heavy Metal para disfrute de nuestros oídos, y de los codos de quienes nos metíamos en los círculos de las primeras filas. "Mandatory suicide", "Hell awaits"... Y la descarga final, apoteósica, con "South of heaven" y "Angel of death". Simplemente arrolladores.
Sin apenas descanco, los más esperados, los alemanes Rammstein salieron a incendiar el recinto con una gran entrada de público, y una presencia impresionante. Rammstein no sólo ofrecen una propuesta musical original e intensa. Su oferta quedaría mermada sin la fabulosa teatralidad con la que combinan sus shows. Tras su visita de hace unos meses, apenas han variado para la temporada de festivales, y los principales puntos del espectáculo se mantienen, al igual que el grueso del set list. Siguen quemando al espontáneo que se sube a las tablas, el teclista es introducido en un barreno por Lindemann y le cae un chorro de fuego, el mismo teclista se hace varios kilómetros sobre su cinta andadora, y "Pussy" acaba con el cañón de espuma, antes de que la barquita lleve a uno de ellos sobre el público, esta vez con una ikurriña para deleite de los autóctonos.
Durante su actuación, la lluvia hizo acto de presencia dos veces, y mucha gente comenzó a dispersarse. El escenario sigue distribuyéndose en dos alturas, con tres miembros del grupo en cada altura y apenas se invaden los espacios entre unos y otros. El vocalista y frontman domina la situación de manera asombrosa, pero... Hay un pero. Si ya lo has visto una vez, se vuelve previsible. Y eso me ocurrió.
Ya, ya sé que AC/DC hacen siempre el mismo concierto, con las mismas escenas, y que Kiss también, pero la oferta global no se puede comparar. Aún así, que nadie me malinterprete, un concierto de Rammstein es muy recomendable.
01. Rammlied
02. B*******
03. Waidmanns Heil
04. Keine Lust
06. Feuer Frei!
07. Wiener Blut
08. Frühling In Paris
09. Ich Tu Dir Weh
10. Do riechest so gut
11. Benzin
12. Links 2-3-4
13. Du Hast
14. Pussy
15. Sonne
16. Haifisch
17. Ich Will
Así discurrió la primera jornada del BBK Live, con todos los conciertos rayando a un gran nivel. A falta de un festi puramente heavy, aprovechamos lo que había. Iron Maiden en Valencia nos espera.
1 comentario:
No sé,aparte de dejarnos una pasta,en qué consiste la seguridad y la responsabilidad de la organización del bbk live..pero a mi este añoen el concierto de Coldplay,creo,algún hijoputa me levantó la cartera..De verdad que no creía que en este tipo de conciertos hubiera gentuza así.Pero al parecer,o soy la única a la que han timado o solo se dice lo bueno,lo genial que es la bbk live(no niego que lo sea)..Un poco de respeto a los que vamos y nos dejamos allí una pasta.
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